ALUMNO Y MAESTRO GUARDIOLA

Hoy es un día raro y lo sabe, hoy es un día contradictorio y es consciente de ello. Pep Guardiola se puede convertir en el 'malo' de la película para el señor Lillo. Si pierde el Almería, su entrenador está literalmente en la calle y la plaza que le ha tocado pra torear se llama Camp Nou y el toro de lidia, y vaya toro, se llama Pep. Lillo y Pep, Pep y Lillo, un 'matrimonio' que viene de muy atrás. El catalán fue alumno del míster del Almería, estuvo a su lado en su aventura como técnico en México y aprendió mucho de él. Contradicciones de la vida hoy el alumno puede exterminar al maestro. Pero Guardiola es todo un caballero y lo demuestra en cada rueda de prensa. Cada intervención ante los medios es una lección de humildad y saber dominar las situaciones tensas. Ayer dijo que no piensa ni se le pasa por la cabeza en la destitución de Lillo y además dijo que era su "maestro". Ganador de seis títulos en una misma temporada, a Guardiola no se le nubla la mente, sabe que para seguir siendo campeón hay que seguir aprendiendo desde la humildad y es lo que le inculca a todo su equipo. El clásico está cerca y no entra al trapo con Mourinho, lo conoce muy bien, sabe como se las gasta el portugués y él está hecho de otra madera. Pep sabe que el partido contra el Real Madrid es importante pero lo primero es lo primero y ahora toca el Almería. No quiere perder energías en discusiones y guerras dialécticas sin fundamento, de las que sólo se pueden sacar cosas negativas. Guardiola es listo, inteligente y sabe que tiene que centrarse en lo inminente. Que pena que lo inminente sea su colega Lillo. Cosas del destino, Guardiola no olvida que antes de maestro fue alumno.