EL POLO PISTACHO...LA CEJA HACIA ABAJO

No ha pasado ni un año y como cambian los escenarios en tan poco tiempo. Quién imaginaría un Clásico con Guardiola en Baviera más pendiente de los Sweinsteiger, Ribery y compañía; y con el polémico y a la vez añorado, Mourinho, con su familia en Londres sin querer saber nada de los Barça- Real Madrid.

Hay contexto nuevo, sorprendentemente, este Clásico fue inesperado no mucho tiempo atrás. El 'Pep Team' bajo la tutela de un señor argentino más conocido por su polo pistacho que por sus aciertos tácticos (la decisión de quitar al mejor del partido Iniesta, todavía la estoy meditando) y el Real Madrid, manejado por un italiano, Ancelotti, que empezó transmitiendo carácter con su ceja al cielo y que va perdiendo día a día crédito en la Castellana. ¿Quién se atreve a dejar a Sergio Ramos en el centro del campo y quitarlo de la retaguardia? ¿Quién deja a Isco en el banco para que juegue Kedhira? ¿Quién juega sin delanteros para meter con calzador a Bale?

Para no faltar a la verdad, los tiempos han cambiado, es verdad, pero todo no es negativo. Ahora un brasileño hace de Messi, un tal Neymar que apunta muy alto, al menos hasta que el '10' del Barça recupere su mejor cara. Y además, ahora el 'Niño Maravilla' Alexis, que estaba con pie y medio fuera de 'Can Barça', hace cosas que hacen honor a su apodo. El gesto técnico de picarla en el 2-0 es de auténtico crack.

Guardiola ya es parte del pasado, Tito se recupera de su dichosa enfermedad, 'Mou' ya no se acuerda de Florentino...la vida sigue. El polo pistacho, de momento, deja una ceja hacia abajo. Eso sí, los Iniesta, Xavi y compañia siguen a lo suyo cambie lo que cambie.

ABIERTO POR VACACIONES

Señoras, señores se avecinan tiempos intensos, el verano nos deleitará con una finalísima europea con España como favorito y unas olimpiadas con Bolt, Nadal, Phelps y compañía. Después de unos meses sin poder escribir por labores mayores...,y gracias que las hay, un servidor vuelve a la carga.

Han pasado muchas cosas. El 'Depor' subió a primera, el Athletic de Bielsa se quedó sin títulos, el gran Guardiola dijo adiós al equipo de sus amores, el Madrid de 'Mou' por fin ganó la Liga y nos dejaron Preciado y recientemente, Miki Roqué. Tantos agridulces que uno se ruboriza al pensar las contradicciones y caprichos del destino. Otro día tendremos espacio para ocuparnos de esto. Ahora, vamos a la actualidad.

Los portugueses liderados por quizás su mejor jugador de todos los tiempos con permiso del mítico Eusebio piensan en España, piensan en como parar a Don Iniesta. Las semifinales ha querido que haya de manera subliminal un pequeño Barça - Madrid. Eso sí, esta vez Casillas y Alonso acompañarán a los Xavi, Piqué y demás. Cristiano contra España. Ultimo escollo para que La Roja siga haciendo historia, para que esos chavales sigan ilusionando a un país al que poco a poco los políticos le ha ido minando la paciencia. Políticos entrenen con ellos y tomen buena nota.

Del otro lado Alemania y Pirlo, sí porque Italia tiene nombre propio Andrea Pirlo. Los alemanes siguen haciendo honor a eso de "el fútbol es un juego de once contra once en el que siempre gana Alemania". De momento ahí están, de nuevo en semifinales. Ozil, Muller, el impronunciable Swensteiger y el 'matador' Mario Gómez. ¿Las apuestas? Una final España - Alemania de nuevo. ¿La sorpresa? Cristiano contra Pirlo.

La suerte está echada, esperemos que esta vez el destino no sea lo caprichoso que fue con el gran Miki Roqué y España siga haciendo gala de ese "Soy español, ¿a qué quieres que te gane?".

DE CÓMO IR PERDIENDO LA ILUSIÓN...

Se está llegando a límites peligrosos. Los últimos debates entre Barcelona y Real Madrid rozan el aburrimiento y lo que es peor aún, se está entrando en una espiral que lleva al espectador a perder la ilusión por seguir la Liga.

Tanto debate entre los equipos que menos pueden quejarse (lo del Madrid en las últimas jornadas es extremo) dejan clara dos cosas: la ley es distinta para los más grandes y si ya había superioridad en cuanto a presupuestos y repartos televisivos, ahora con la presión hacia el colectivo arbitral ni les cuento.

Señoras, señores, un servidor pierde la ilusión por ver partidos en los que por una cosa o por otra el resultado lo sabemos. Soy el primero que alaba el juego de los Iniesta y compañía, pero que cuando no funcionan los Cristiano y compañía, el culpable sea el árbitro...

Y les dejo varias reflexiones: Quién ganaría si los árbitros fueran robots, ¿habría tanta diferencia de puntos? y si el reparto fuese razonable...ganarían siempre los mismos. Lo que queda claro es que para los quinielistas hay dos casillas acertadas todas las semanas. Pero...¿y la ilusión? ¿Alguien ha pensado en el aficionado?

'BABÁ-RIDAD'

Tranquilos que no es mi intención lanzar las campanas al vuelo ni mucho menos, pero me quedo con dos imágenes del partido Sevilla- Atlético de Madrid: el 'Atleti' pidiendo la hora y Simeone celebrando efusivamente el ¡empate! en el Sánchez Pizjuán.

Está claro que muchas cosas han cambiado en territorio nervionense. Kanouté, el mágico Kanouté, vive una tercera juventud y se ha echado el equipo a las espaldas. Escudé que parecía eliminado del mapa, ahora corta balones increibles. Navas, el niño Navas, está dejando claro que debe tener un puesto en la Eurocopa. Y además, señoras, señores, Negredo se lesiona y llega un tal Babá (primo hermano de Biri-Biri) y marca un golazo. Al Sevilla ahora le sale todo a pedir de boca.

Pero no todo en la vida es casualidad. Michel ha sabido dar su sitio a los hombres importantes. Palop, Kanouté y Navas, los pocos que quedan del Sevilla grande de Juande Ramos, llevan la voz cantante. Michel no olviden fue obrero antes que arquitecto y se las sabe todas. El cambio del Sevilla, una barbaridad.

CALIDAD INFINITA, PARO INFINITO

Muchos de los que se dedican a la política (por no decir todos) deberían tomar ejemplo del grado de compromiso de los que defienden los colores de la 'Roja', que ayer fue de azul celeste. Esta generación de tremendos futbolistas parece no tener fin y cuando el máximo goleador de la historia, Villa, y otro de los grandes Torres no está, España sigue rindiendo a un espectacular nivel.

En la Rosaleda, rodeada de aires andaluces esta selección denotó calidad suprema. Los de Del Bosque, lejos de preocuparse de los ausentes, tiraron de un jovensísimo Munain, de un magnífico Jordi Alba y arriba, por si alguien se preocupaba del gol, pues ahora llega un tal Soldado que lo mete todo. Tres goles del 'Ché' y sitio casi seguro para la Eurocopa.

España parece ser infinita, cuando empiezan a caérsele piezas se regenera con jugadores jóvenes que rinden igual o mejor que los anteriores. ¡Ah! y si no están Xavi o Iniesta, salen Thiago y Silva que está entre los mejores del mundo actualmente. Si no cae un meteorito o algo parecido, todo apunta a que España va camino del tercer entorchado consecutivo. Por cierto, el paro sigue subiendo.

ASÍ, SÍ

Por fin, ha tenido que pasar mucho tiempo. Han tenido que reconocer errores Monchi y Del Nido, han tenido que traer a un entrenador con enjundia para sacar la situación adelante y además, se han dado cuenta de una cosa que, para un servidor, era un secreto a voces: Kanouté es indispensable en el Sevilla.

La imagen de los de Nervión ayer fue fantástica, aunque aún quedan cosas por pulir. Navas volvió a parecerse al Duende que se va de todo el mundo, Medel hizo su trabajo a la perfección y además marcó, Reyes y Rakitic estuvieron a un buen nivel, Palop dio contundencia a la porteria y sobretodo, lo más importante, Kanouté fue Kanouté. El de Mali es la referencia arriba, a la espera de que Negredo recupere su mejor forma. Frédéric es el mejor jugador de la historia del Sevilla y ayer lo volvió a demostrar.

Michel es zorro viejo en esto del fútbol y le ha dado los galones a los pesos pesados de antaño, a los que tienen oficio, y esos se llaman Kanouté, Palop y Navas. El Sevilla vuelve a mirar arriba dando un golpe en la mesa derrotando en Mestalla a todo un Valencia. Sevilla así, sí.

MADRID 2020

Hay veces que te pones a escuchar a la gente de otros países y te das cuenta que España es mucha España. Madrid quiere organizar los Juegos Olímpicos de 2020. Es un objetivo, es una ilusión y es una deuda del deporte con el pueblo español.

Desde Barcelona 1992, que marcó un antes y un después en esto del olimpismo, el deporte español ha crecido a pasos agigantados. Ya no sólo me refiero a los éxitos deportivos conseguidos en aquella olimpiada, también, por supuesto, a la magnífica generación derivada de aquel evento que está dando sus frutos en la actualidad.

Las olimpiadas son una inversión del presente, pero no olviden el futuro. Los éxitos llegarán. Los Nadal, Gasol y compañía son los resultados de la fuerte inversión que un gran día se hizo por uno de los regalos de los dioses: el deporte. Madrid 2020 puede seguir regalándonos ilusión y deporte, cosa que escasea en los tiempos que corren.